Este modelo se utiliza comúnmente para productos que requieren un empaque seguro y fácil de abrir, como productos electrónicos, alimentos congelados o bienes frágiles.
Este modelo es ideal para aquellos productos que necesitan un empaque seguro y de fácil apertura, tales como productos electrónicos, alimentos congelados o bienes frágiles. Su diseño garantiza que el contenido se mantenga protegido durante el transporte y almacenamiento, minimizando el riesgo de daños. Asimismo, facilita la experiencia del consumidor al permitir un acceso sencillo al producto sin necesidad de herramientas adicionales. Esto no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también contribuye a la eficiencia en la cadena de suministro. En resumen